Civiles que están vinculados a asesinatos y desapariciones forzadas de personas durante el tiempo de la dictadura comienzan a ser denunciados. Uno es Roberto Izquierdo Menendez un influeyente empresario del área pesquera y maderera tendrá que reponder a la Justicia acerca de su rol el asesinato de 19 trabajadores y sindicalistas. (Foto tomada de sonapesca.cl)
Santiago de Chile, 21 de Agosto de 2015. (Ecocéanos News)— El empresario y dirigente empresarial pesquero Roberto Izquierdo Menéndez debería ser citado a declarar en la investigación que realiza el magistrado Carlos Aldana respecto al asesinato de 19 trabajadores y dirigentes sindicales de ferrocarriles y de la Compañía Manufacturera de Papeles y Cartones, (CMPC) hechos ocurridos en 1973 cuando Izquierdo Menéndez tenía un cargo gerencial de Forestal Mininco, de la CMPC.
Según el diario Elmostrador.cl, a días del cruento golpe cívico-militar que derrocó al gobierno de la Unidad Popular, 19 trabajadores y dirigentes sindicales de la CMPC y ferrocarriles de los pueblos de Laja y San Rosendo fueron detenidos por carabineros. De ahí su rastro desapareció durante seis años, apareciendo enterrados en un bosque que seguían explotando las empresas madereras. Esto abrió una investigación en 1979 la que fue llevada a cabo por el ministro en visita de la Corte de Apelaciones de Concepción, José Martínez Gaensly, quien estableció que carabineros de la zona habían sido los responsables del asesinato masivo. Por tratarse de personal uniformado, el juez Martínez se declaró incompetente, transfiriendo la investigación a la justicia militar, la cual la sobreseyó.
Sólo 21 años después, a petición de la Asociación de familiares de Ejecutados Políticos y del Programa de Continuación de la Ley 19.123 del Ministerio del Interior, el juez Carlos Aldana de la Corte de Apelaciones de Concepción, dejó sin efecto el sobreseimiento de la justicia militar y desde del 2011 comenzó a interrogar a la compleja red que facilitó y encubrió el asesinato de estas 19 personas. En ella se entregan numerosas pistas que revelan la responsabilidad que tuvo el grupo Matte en entregar las condiciones y medios para encubrir la masacre.
En septiembre de 1973, Roberto Izquierdo Menéndez, tenía un cargo en la gerencia general de Forestal Mininco, de la CMPC, siendo su nombre citado en diversos testimonios recientes que intentan revelar las responsabilidades cívico-militares en esta masacre. Elmostrador.cl afirma que la próxima semana Roberto Izquierdo M. debería comparecer ante la Justicia.
La relación entre la CMPC, los carabineros de la zona y militares de la ciudad de Los Angeles, está suficientemente documentada en el proceso investigativo. Los prisioneros se trasladaron al sitio de la matanza utilizando transportes de la empresa forestal. Por su parte, quien comandaba la patrulla y responsable de ejecutar a los trabajadores, el teniente (r) Alberto Juan Fernández Michell, tenía su residencia en una de las casas del predio de la CMPC.
El periodista Javier Rebolledo, destaca en su libro La Danza de los Cuervos, que previo al Golpe de septiembre de 1973, la CMPC tuvo operando dentro de sus instalaciones a un equipo de inteligencia del Regimiento de Los Ángeles, los que probablemente “ayudaron a hacer las listas de detenidos”.
El 11 de septiembre de 1973, este equipo volvió a Los Ángeles, viajando a Laja el comandante del regimiento e intendente, Alfredo Rehren Pulido, quien dio la orden a Carabineros para que detuvieran a las 19 trabajadores. Años después, Rehren Pulido pasó a trabajar como empleado de la Papelera en Puente Alto. Diversas pistas involucran a los asesinos materiales con los ideólogos y encubridores de la CMPC.
El texto del periodista Rebolledo citado por ElMostrador señala que según Guillermo Reyes, uno de los jefes de forestal Mininco avisó a los camioneros respecto de la existencia de fosas con cadáveres.
El día que volvió a la planta de celulosa y fue hasta el casino de la población, ubicado dentro del complejo de la empresa «Dos carabineros vestidos de civil, a quienes identificó como los funcionarios de la tenencia de Laja Gerson Nilo Saavedra y el suboficial Pedro Rodríguez Ceballos, lo tomaron detenido y lo llevaron al cuartel para interrogarlo.
Ahí habría sido amenazado con ser trasladado a la isla Quiriquina, centro de detención para presos políticos.
Uno o dos días después del interrogatorio, Reyes contó esta situación a la gerencia general de Mininco: “Me comuniqué telefónicamente con mi jefe, de nombre Roberto Izquierdo, dándole a conocer que había sido trasladado a Carabineros, por cuanto yo sabía del hallazgo de unos cuerpos en uno de los campos que controlaba”. En su declaración, Reyes dijo no recordar bien qué le dijo a Roberto Izquierdo. De lo que estaba seguro era “que este me dijo que me quedara tranquilo y callado”.
Izquierdo-Menéndez es uno de los empresarios y dirigente de patronales más influyentes del recién privatizado sector pesquero, proceso donde tuvo un papel clave. Ha presidido la Sociedad Nacional de Pesca A.G. (SONAPESCA), la Asociación de Industriales Pesqueros (ASIPES) y es actualmente consejero de la SOFOFA. Además es vicepresidente del Diario Financiero, es parte de la Asociación Nacional de la Industria del Reciclaje (ANIR), y se desempeña como Consejero de la Corporación de la Madera (Corma).
Además es miembro del directorio de la compañía salmonera Yadrán S.A., propietario de la Pesquera Alimentos Marinos (ALIMAR), matriz de sus inversiones pesqueras, y de la Pesquera MARFOOD . Esta última empresa, en alianza con empresarios pesqueros noruegos vinculados a la familia Mogster. Las producciones de harina de pescado de esta empresa se destinan fundamentalmente a la fabricación de alimentos para la industria salmonera en el sur de Chile.
Izquierdo Menéndez también es uno de los empresarios más importantes del sector forestal. Es director de Almendral S.A. (Controladores de Entel) -donde los Matte tienen 32,07%-, Petroquim S.A, y de Forestal y Papelera Concepción.
Con dos de sus 11 hermanos, Vicente y Rosario, participan en Comasa, produciendo papel tissue para el mercado premium de Estados Unidos.
Uno de los hermanos de Roberto, Diego Izquierdo Menéndez, fue uno de los autores del crimen del general René Schneider, para tratar de generar las condiciones al golpe militar de 1973. Diego no estuvo jamás en la cárcel por este hecho, siendo favorecido por la Ley de Amnistía de fines de los ‘70, después de volver de Argentina, donde estuvo oculto bajo la protección de sectores de ultraderecha y militares transandinos.
Tal como destaca el libro del periodista Rebolledo, “Izquierdo Menéndez pertenece a uno de los clanes familiares empresariales beneficiados por el cuerpo legal que les otorgó entre el 85 y el 100% de las cuotas de la gran industria y el goce monopólico de la renta pesquera, estimada en 740 millones de dólares anuales».
La denominada Ley Angelini- Longueira de privatización pesquera ha sido calificada por el Centro Ecocéanos como «la mayor expropiación de bienes nacionales y recursos naturales de la reciente historia chilena”.