Para los asistentes al Congreso Mundial de Áreas Marinas Protegidas que se reaizará en Coquimbol, será difícil entender que este gobierno que va a ser galardonado como uno de los 5 que más protege los océanos, intenta en la remota y prístina región patagónica de Magallanes, dejar sin protección a las aguas marinas adyacentes al Parque Nacional donde aún habita el pueblo nómade del mar más amenazado del planeta.
Por: Juan Carlos Cárdenas y Patricio Igor Melillanca
30 de agosto de 2017
A partir de septiembre, el Ministerio de Bienes Nacionales desarrollará en Puerto Natales, región de Magallanes y Antártica chilena, la consulta indígena sobre el proyecto de reclasificación y ampliación de la actual Reserva Forestal Alacalufes, para elevar su categoría a Parque Nacional integrante de la Red de Parques de la Patagonia. Esta consulta obligatoria es parte de los compromisos internacionales contraídos por el Estado Chileno al haber ratificado el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) de Naciones Unidas.
El 15 de marzo del 2017 fue suscrito el protocolo del acta de acuerdo entre la Presidenta de la República, Michele Bachelet, y la Fundación Tompkins Conservation, ratificando los compromisos de donación de 407.645 hectáreas, de terrenos silvestres pertenecientes a la fundación, la anexión de 900.000 has. de terrenos fiscales, y la re-categorización de áreas protegidas regionales. A su vez, los Ministros de Medio Ambiente, Hacienda, Economía, Bienes Nacionales, Agricultura, la Subsecretaría de Turismo y el Director Ejecutivo de la Corporación Nacional Forestal (CONAF), junto con diversas fundaciones, establecieron el cronograma y los compromisos para concretar este proyecto de conservación patagónica.
Sin embargo, este proceso se encuentra bajo un activo lobby y condicionamiento de parte de los diversos grupos empresariales y de inversionistas interesados en los millonarios negocios turístico y salmonero-exportador, los que cuentan con las complicidades de altos funcionarios de los Ministerios de Economía, Hacienda y Medio Ambiente.
Expresión de lo anterior, es que el 10 de abril se realizó una sesión extraordinaria del denominado “Consejo de Ministros para la Sustentabilidad”, el cual decretó que las aguas marinas adyacentes al futuro Parque Nacional quedaban excluidas del status de protección ambiental, la cual sólo se concedería a la zona terrestre. (1)
Para asegurar la imposición de esta regresiva y autoritaria medida, el consejo de ministros creó un “candado” para el proceso de consulta indígena, al señalar explícitamente que “se debe dejar constancia que los límites del nuevo Parque Nacional se circunscriben estrictamente a la porción terrestre del área. La cartografía respectiva será trabajada en una comisión conformada por los Ministerios de Bienes Nacionales, Medio Ambiente, Hacienda y Economía”, y que “los resultados de ese trabajo serán presentados al Consejo de Ministros para la Sustentabilidad para su aprobación”.
Con posterioridad, el Consejo de Ministros le propondría a la Presidenta de la República la re-categorización de la Reserva Forestal Alacalufes y su ampliación, “en los términos referidos anteriormente, para su posterior oficialización mediante Decreto Supremo del Ministerio de Bienes Nacionales”.
Frente a esta arbitrariedad del cuestionado sistema ambiental chileno cabe preguntarse ¿Qué papel jugarán los funcionarios de los ministerios de Hacienda y Economía elaborando cartografía?, ¿Puede el consejo de ministros condicionar el proceso de consulta de las comunidades Kawesqar realizado bajo el Convenio 169 de la OIT?, y ¿Cómo se aseguran la representación y los intereses de los ciudadanos, comunidades costeras y pueblos originarios en este proceso?
Esta situación absurda y carente de toda justificación científica y técnica que afectará la integridad ecosistémica de la red de parques de la Patagonia, sólo puede ser entendida por los intereses económicos-inmobiliarios en juego -estimulados por las 2,8 millones de hectáreas de territorios de altísimo valor ecológico y escénico-, y las redes de corrupción político-burocrático-empresarial que buscan asegurar la expansión de los monocultivos industriales de salmónidos, los cuales triplicarán sus producciones en Magallanes el 2020.
La decisión del Comité de Ministro ilidad presenta varias situaciones conflictivas:
Registros arqueológicos señalan que el pueblo Kawesqar habita hace 6.000 años en los territorios marino-costeros entre el Golfo de Penas y la isla Diego de Almagro, es decir 5.800 años antes que se constituyera la República de Chile. Por ello, frente al abusivo, centralista y colonial comportamiento del Estado chileno con las regiones y pueblos originarios patagónicos, las comunidades demandan tener injerencia en la administración de su maritorio, depredado y contaminado por las empresas que se establecen con el consentimiento y la protección del Estado.
También exigen que se haga valer la legislación nacional e internacional que protege su derecho a ejercer prácticas ancestrales vinculadas a su maritorio, biodiversidad y recursos naturales, los cuales les proveen de pesca, caza, madera y servicios ambientales, entre otros.
“El Estado de Chile debe impulsar procesos de reparación a favor de los pueblos sobrevivientes del proceso de exterminio, reconociendo el derecho que tienen sobre el territorio ancestral, implementando políticas y acciones que eviten su omisión, invisibilización y silenciamiento cultural de los Pueblos Australes. Teniendo especial cuidado en el resguardo del territorio marítimo y terrestre que sigue siendo utilizado desde hace más de seis mil años” (3).
Las comunidades Aswal Lajep, Grupos Familiares Nómades del Mar, Atap y Residente en Río Primero, han manifestado su rechazo a la abusiva y unilateral imposición que condiciona la consulta indígena al pueblo Kawesqar que se realizará entre el 9 y 10 de septiembre de 2017 en Puerto Natales. Por ello señalan en su reciente declaración pública que Por “decisión del consejo de Ministros para la sustentabilidad, hoy vemos nuevamente nuestros derechos territoriales vulnerados. Con la clara intención de favorecer el avance del empresariado salmonero, el que ha venido a invadir nuestro ancestral territorio con especies exóticas invasoras y cultivos intensivos, industriales contaminantes, afectando los últimos canales de la Patagonia libres de contaminación salmonera”.(4)
Entre el 4 al 8 de septiembre se realizará el 4° Congreso Mundial de Áreas Marinas Protegidas en las ciudades de La Serena y Coquimbo, Chile. Allí se reunirán figuras internacionales como el actor Leonardo Di Caprio y la investigadora Sylvia Earle, junto a más de dos mil científicos, Ongs, gestores y administradores de áreas marinas protegidas provenientes de 80 países signatarios del Convenio sobre Biodiversidad Biológica (CBD).
En este encuentro, el saliente gobierno de Chile recibirá el reconocimiento internacional como uno de los cinco países líderes en la protección de los océanos. Por ello para los participantes será difícil entender que este mismo gobierno que va a ser galardonado intenta en la remota y prístina región patagónica de Magallanes, dejar sin protección a las aguas marinas adyacentes al Parque Nacional donde aún habita el pueblo nómade del mar más amenazado del planeta.
Llamamos a los participantes a informarse y apoyar la lucha del pueblo Kawesqar por sus derechos y la defensa de la Madre Mar.
Referencias1.http://portal.mma.gob.cl/wp-content/uploads/2015/03/Acuerdo-No172017.pdf2. 2.http://www.subpesca.cl/portal/617/w3-article-84821.html3.http://www.radiodelmar.cl/2017/08/alertan-que-futuro-parque-nacional-alacalufes-no-protegera-las-aguas-marinas-de-esa-zona-patagonica/4.http://www.eldesconcierto.cl/2017/08/26/comunidades-kawesqar-denuncian-que-futuro-parque-nacional-alacalufes-no-protegera-aguas-de-la-patagonia/