Para el Centro Ecocéanos “ estas espectaculares ganancias que evidencia el empresariado salmonero son consecuencia directa de las periódicas crisis que generan sus malas prácticas sanitarias y ambientales, y cuyos costos son transferidos al medio ambiente, la salud pública, los dineros públicos, y a los trabajadores de la industria, los que padecen de una creciente precarización laboral y la reducción de casi 5.000 empleos con posterioridad al 2016”.
Puerto Montt, 20 de marzo del 2018. (Ecoceanos News)– La industria de cultivo intensivo de salmónidos con base en Chile, luego de la mega crisis sanitaria, ambiental y social generada por los florecimientos de algas tóxicas y nocivas del 2016, continúa por dos años consecutivos obteniendo espectaculares ganancias. Esto se ha visto reflejado en los resultados que reportan las compañías listadas en la Bolsa de Santiago. Sobre la base de los resultados de cuatro salmonicultoras que transan sus acciones en Chile, éstas tuvieron un incremento de ganancias de un 60% el año pasado, en comparación con el 2016.
AquaChile, ligada a Víctor Hugo Puchi y Humberto Fischer, ganó US$59,5 millones, subiendo sus utilidades en más de siete veces. En tanto, Australis, vinculada a Isidoro Quiroga, anotó beneficios por US$73,4 millones. Es decir, aumentaron un 82,1% respecto de 2016.
Salmones Camanchaca, relacionada con Jorge Fernández y Francisco Cifuentes, logró una utilidad de US$31,7 millones, 17% superior a 2016. Multiexport Foods, ligada a José Ramón Gutiérrez, Martín Borda y Alberto del Pedregal, alcanzó ganancias por US$88,2 millones en 2017, lo que equivale a un incremento de 70% respecto del año previo.
Blumar obtuvo ganancias por US$22 millones, lo que significó una disminución de 50%, versus lo obtenido en 2016.
Estas empresas representan un 91,4% de las salmoneras listadas en la Bolsa de Santiago en términos de capitalización de mercado y solo resta que Invermar informe sus resultados.
Para el Centro Ecocéanos “estas espectaculares ganancias que evidencia el empresariado salmonero son consecuencia directa de las periódicas crisis que generan sus malas prácticas sanitarias y ambientales, y cuyos costos son transferidos al medio ambiente, la salud pública, los dineros públicos, y a los trabajadores de la industria, los que padecen de una creciente precarización laboral y la reducción de casi 5.000 empleos con posterioridad al 2016”.
En tanto, el presidente de SalmonChile, Arturo Clément, dijo a El Mercurio que otros factores están influyendo en este escenario. Uno de ellos es el aumento razonable y conservador de la oferta de salmón por parte de Noruega y Chile, sus dos principales productores. El líder gremial también destacó que las salmoneras se preocuparon y han estabilizado su situación sanitaria. Además, el timonel de SalmonChile destacó que hay un foco importante de las compañías en reducir costos de producción, lo que ha ayudado a una mayor competitividad. A su vez, subrayó que la demanda por el producto fue muy fuerte.