-A pesar del veto de China a los productos del mar nipones, junto a las críticas y manifestaciones de pescadores y comunidades locales, el gobierno japonés no cesa en su plan de descargar 1,3 millones de toneladas de agua radioactiva, lo que transformaría al océano Pacifico en su vertedero de desechos nucleares.
-Gobierno chileno se mantiene en silencio ante solicitud de más de treinta organizaciones ciudadanas y comunidades costeras instándolo a presentar junto a los países latinoamericanos una queja diplomática a Japón, que demande el cese inmediato de sus vertidos de aguas residuales radioactivas en el océano Pacífico.
02 de octubre, 2023 (Ecoceanos News).- Japón comenzará este 05 de octubre la segunda ronda de descarga de aguas residuales radioactivas provenientes de la planta nuclear de Fukushima Daishi (uno), anunció la Tokyo Electric Power (Tepco), operador de la central nuclear destruida tras un terremoto y un tsunami en 2011.
El 24 de agosto, Japón inició el controvertido vertido al océano Pacífico de parte de sus 1,34 millones de toneladas de agua residual acumuladas en la central, generando el rechazo de las comunidades costeras y de pescadores del norte de Japón, y los reclamos de China, Corea del Sur, y de los Estados insulares de la Cuenca del Pacífico.
Las primeras 7.800 toneladas de agua con residuos radioactivos de Fukushima ya están en el océano Pacífico
En el primer vertido, que terminó el 11 de septiembre, se eliminaron aproximadamente 7.800 toneladas de agua al océano Pacífico de las 1,34 millones de toneladas previstas, lo que equivale a la capacidad de más de 500 piscinas olímpicas.
Según Tepco, dado que la capacidad de almacenamiento del agua empleada para refrigerar el combustible de la central nuclear estaría casi al límite, Japón habría optado unilateralmente eliminar un total de 31.200 toneladas, las que serán divididas en cuatro fases hasta marzo de 2024.
Vertido de residuos radioactivos se mantendrá por 30 años
El vertido de desechos radioactivos -que podría prolongarse durante 3 décadas-, tiene por objetivo liberar espacio para, eventualmente, retirar el combustible radioactivo y los escombros de los dos reactores accidentados de la planta nuclear de Fukushima.
Después de efectuarse la primera descarga de residuos, la República Popular China prohibió las importaciones de productos marinos de origen japonés, mientras que la Federación Rusa, la cual presenta relaciones distantes con Tokio, también se plantea un veto a las importaciones desde Japón.
Ecoceanos: Ciudadanía y comunidades costeras chilenas exigen al gobierno manifestar su rechazo al abusivo accionar ambiental del gobierno japonés
En Chile, las organizaciones ciudadanas, movimientos socioambientales, comunidades costeras y de pueblos originarios están llamando al gobierno de Gabriel Boric a presentar una queja diplomática a Japón, instándolo a suspender el actual vertido de aguas residuales radioactivas en el océano Pacífico.
De forma complementaria, llaman a la cancillería chilena a impulsar iniciativas multilaterales en la región del Pacífico latinoamericano para enfrentar esta amenaza para el medio ambiente y la biodiversidad oceánica, la salud, seguridad alimentaria de los pueblos e intereses de las comunidades costeras.
El director del Centro Ecoceanos, Juan Carlos Cárdenas, ha señalado que “este abusivo accionar de la dirigencia nipona no sólo trae amargos recuerdos del colonialista comportamiento de Japón en el Pacífico durante la primera mitad del siglo pasado, sino que además evidencia una escasa consideración del papel fundamental y valor ambiental del océano
Pacífico, tanto en la mitigación de los graves impactos del cambio climático, así como de su importancia para la vida, salud, alimentación, comercio y la subsistencia de 2.100 millones de personas en Asia y las Américas”.
En el Día Nacional del Medio Ambiente: Vertidos radioactivos de Fukushima son una acción ecocida e irrespetuosa para la comunidad de la Cuenca del Pacifico
Según el médico veterinario, “en el Día Nacional del Medio Ambiente, el segundo vertido de residuos radioactivos al océano Pacífico exige un pronunciamiento de la Comisión Permanente del Pacífico Sur (CPPS) de las cancillerías de los países latinoamericanos ribereños, así como de la totalidad de la comunidad de Estados de la Cuenca del Pacífico”.