Puerto Montt, 28 de noviembre de 2023. (Radiodelmar.cl)- Luego de un tercer evento de mortalidad masiva de salmones de cultivo en menos de un mes en el Estuario de Reloncaví, al sureste de Puerto Montt, las comunidades locales demandan avanzar a que esta zona sea un lugar libre de la industria del salmón.
El Servicio Nacional de Pesca (Sernapesca) publicó a principios de noviembre una prealerta que exige a las empresas medidas excepcionales ante los potencialmente seguros episodios de Floraciones Algales Nocivas (FAN) que se comenzarían a generar esta primavera y verano austral.
El 14 de noviembre, la oficina estatal informó que 13 centros de cultivos de salmónidos en el Estuario de Reloncaví reportaron la activación del plan de contingencia de FAN ante la presencia de la microalga Thalassiosira pseudonana, en niveles considerados nocivos para peces. Posteriormente, 7 de los centros activaron, además, su plan de contingencia por mortalidad masiva.
Tres días después, Sernapesca registraba un total de 18 centros de cultivo con planes de contingencia activados por FAN.
La última información oficial, del lunes 27 de noviembre, aseguró que «hay 28 centros de cultivo activos con una biomasa (peces vivos) total de 49.727 toneladas. Del total de centros, 11 han activado sus planes de acción por Floración Algal Nociva y 2 de ellos sus planes de acción por mortalidad masiva».
Sofia Riveros Mancilla, profesional de Ciencias Ambientales y miembro de la Red Ambiental Cuencas del Reloncaví, recordó que hace más de 20 años se instaló la industria del salmón en el estuario y han visto el impacto progresivo en la pesca artesanal que se ha ido extinguiendo. “Las personas que se han dedicado toda su vida a esta actividad en el mar han debido buscar otras maneras de generar ingresos para su subsistencia».
Asimismo, la falta de peces nativos en el estuario ha generado un impacto en la soberanía alimentaria y en la dieta cotidiana y ancestral de los habitantes de esta zona.
También las familias han perdido el acceso a playas limpias debido a la contaminación y el uso de espacios por parte de la industria. «No podemos estar en cualquier orilla de playa disfrutando el agua, generalmente está aceitosa y con un color extraño».
Sofía Riveros señaló a radiodelmar.cl que «si bien hay condiciones naturales que van estimulando ciertos eventos, la principal causa de la mortandad de salmones es de la misma industria. Debido a su avaricia, el estuario está explotado y enfermo. No se puede esperar que el cultivo de peces sea saludable en un ambiente donde sus condiciones naturales y de equilibrio ecosistémico ha sido alterado por tantos años».
La dirigenta social instó a trabajar por una nueva Constitución, con una comunidad organizada para hacer posible los cambios que se requieren, como un Estuario sin salmoneras. “Esperamos realizar este cambio antes de que sea demasiado tarde».
Radiodelmar.cl conversó con Leopoldo Muñoz, del gremio de turismo de Cochamó, quien afirmó que «los intereses de la comunidad no están relacionados con el crecimiento del negocio de los salmoneros, son otras las actividades que se desarrollan las que mantienen la economía de la comuna».
«Las comunidades deben padecer continuamente los desastres ambientales provocados por el cultivo del salmón. La última mortandad (de salmones) atribuida al crecimiento de las algas nocivas y al Fenómeno del Niño es el mismo cuento de siempre. Esperamos, esta vez, que el gobierno y sus instituciones actúen y sancionen a las empresas responsables, porque es una vergüenza”.
La compañía Salmones Austral se reunió con algunas personas de la zona para explicar desde su perspectiva las mortalidades masivas de peces, pero sin asumir ninguna responsabilidad.
Nicolás Coloma, integrante de la Corporación Estuario, precisó que la industria extiende su operación hasta que el sistema colapsa, pero no se hace responsable del desastre ambiental que genera y se lo adjudica a fenómenos climáticos.
“Si la empresa argumenta que lo que está pasando tiene relación con el clima, con variables que exceden a su gestión, entonces ha llegado momento de parar con la industria salmonera», dijo Coloma.
Sofía Riveros señaló que la industria al no asumir su responsabilidad por la mortalidad masiva de salmones y no entregar información al respecto “demuestra que para ella la comunidad no es importante, más bien quiere mantenernos sumisos, confusos e ignorantes. Lamentablemente nos menosprecian».