Valparaíso, 18 de Noviembre de 2021 (radiodelmar.cl)– La organización y movilización de comunidades costeras e indígenas y la sociedad organizada, generó que el parlamento chileno comience a discutir un proyecto de Ley que busca prohibir la entrega de nuevos permisos para cultivar salmón industrial en las áreas protegidas por el Estado, y establecer un plazo de salida de los centros salmoneros ubicados en estas zonas de conservación de los ecosistemas marino costeros.
La propuesta legislativa, presentada este miércoles (18.11.2021), a días de las elecciones parlamentarias y presidencial, busca «excluir la actividad de cultivo de especies hidrobiológicas exóticas en Áreas Protegidas por el Estado» y se orienta directamente a la industria del salmón que continúa su agresiva expansión geográfica y productiva en toda la Patagonia.
Lo curioso es que ningún diputado de esas regiones, Aysén y Magallanes, y ni siquiera el candidato presidencial Gabriel Boric, representante de Punta Arenas en el Parlamento, aparecen firmando o pronunciándose respecto a esta demanda de las comunidades locales, organizaciones sociales y mundo ambientalista.
El proyecto de Ley fue presentado por el presidente de la comisión de pesca de la Cámara de Diputados, Jorge Brito, que se baso en una anterior declaración de más de 60 organizaciones y comunidades que exige: «No más entrega de nuevas concesiones, no más ampliación de concesiones acuícolas actuales ni aumento de biomasa en concesiones existente; así como también la URGENTE SALIDA de todos los ecosistemas marinos frágiles como son lagos, fiordos y canales».
Ahora, organizaciones y comunidades muestran su apoyo a esta iniciativa, pero mantienen su demanda para que la industria salmonera salga de todos los territorios tanto de pueblos originarios como de los lugares donde ha generado desastres ambientales, sanitarios y sociales.
Al presentar el proyecto de Ley, el diputado Brito afirmó que “la actividad salmonera ha venido acompañada de una degradación de los ecosistemas marinos y, en especial, de los fondos marinos. Es por eso que es una contradicción que el Estado reconozca la fragilidad de algunos ecosistemas, como ocurre en la Patagonia austral, y al mismo tiempo autorice el funcionamiento de industrias que degradan los ecosistemas”.
Leticia Caro, de la comunidad Kawesqar Nómades del Mar, dijo a radiodelmar.cl que este proyecto de Ley «es un avance, pero nuestras comunidades siempre han demandado que la industria salmonera no solo salga de las Áreas Protegidas por el Estado, sino que salgan de todos nuestros territorios, nuestro espacio ancestral que defendemos como pueblos originarios».
En tanto desde Tierra del Fuego, David Alday, de las comunidades del pueblo Yagan, afirmó que su «postura como pueblo originario Yagan, como pueblo costero, siempre ha sido ‘NO a las salmoneras’ en las Áreas protegidas ni en ningún lugar, porque son empresas extractivistas que no respetan al medio ambiente, no respetan a las comunas donde ingresan, no conversan y de esos ejemplos hemos tenido un montón, que se instalan en la noche y al otro día la gente ve con sorpresa las instalaciones salmoneras, tal como pasó en Puyuhuapi. Tienen prácticas de nivel delincuencial, y eso preocupa».
Por su parte, la representante de Fundación Elemental Nature, Ximena Schott, señalo que «este avance de la salida de la salmonicultura de las Áreas Protegidas lo vemos como un primer paso, pero vamos a continuar movilizándonos y vamos a continuar estudiando y vamos a seguir presentando evidencia científica del daño que la salmonicultura provoca persistentemente y ha provocado en todos nuestros ecosistemas, territorios y en nuestro modo de vida, porque esto ha afectado a tres regiones (Los Lagos, Aysén y Magallanes), por 40 años».
Respecto al momento político eleccionario y a la evidente ausencia de parlamentarios de la Patagonia en este proyecto de Ley, desde Puerto Natales, Leticia Caro, del pueblo Kawesqar dijo a radiodelmar.cl que «lo curioso es que ningún diputado de Aysén, ni de Magallanes aparece firmando esta iniciativa que es una demanda de las comunidades costeras, organizaciones sociales, emprendimientos de turismo y pueblos originarios. Ni siquiera el candidato presidencial, Gabriel Boric, que es diputado por Magallanes, ni el candidato Karim Bianchi, firman o se pronuncian por esta iniciativa».
Desde las comunidades del pueblo Yagan, también se pronunciaron. David Alday de las comunidades Yagan, señaló que les extrañaba que «no haya firmado ningún parlamentario de la región, y por eso tenemos diputados que ven a la industria salmonera como gran industria, pero no podemos basarnos solamente en números. Hoy el planeta está pidiendo un cambio en la economía y el resguardo de lo que nos rodea, y eso no lo hace la industria», dijo Alday.
«Exigimos que las autoridades regionales transparenten su relación con la industria salmonera y expliquen porque no firmaron este proyecto de Ley», sentenció el representante indígena Yagan.
El proyecto de Ley se presentó a solo 5 días de la elección presidencial y de parlamentarios. Pero la iniciativa parlamentaria no lleva la firma de ningún diputado de Aysén o Magallanes.
Frente a esto, Ximena Schott, de Elemental Nature, expuso su preocupación por el silencio de los parlamentarios de Aysén y Magallanes que frente a esta realidad «no tienen nada que decir respecto a los brutales impactos que la salmonicultura ha provocado en nuestras regiones, y eso es una situación que hay que dejar clara hoy día a pocas horas de las elecciones presidenciales y parlamentarias de nuestro país».
«Si los parlamentarios de nuestra zona, nuestras tres regiones, no tienen nada que decir, ni siquiera incluir su firma, y apoyar este proyecto de ley, significa que no estamos representados como comunidades, están representando los intereses de la industria», señalo la integrante de Elemental Nature.
En enero de 2019 se firmó el decreto de creación de la Reserva Nacional Kawésqar, Región de Magallanes y la Antártica Chilena. Sin embargo, evidenciando el verdadero papel que cumple la coalición política, burocrática, empresarial que controla al Estado chileno, en menos de tres años se han autorizado 69 nuevas concesiones de monocultivos salmoneros industriales en sus aguas interiores, y más de 100 están en trámite para ser aprobadas.
El Centro Ecocéanos señaló ante la presentación del proyecto de ley que “Las organizaciones sociales, comunidades costeras y pueblos originarios deberán estar vigilantes, de manera de ir monitoreando el avance de esta exigencia ciudadana que busca eliminar todas las concesiones de salmonicultura intensiva basadas en especies carnívoras exóticas en las áreas protegidas de nuestro país”.
La organización ciudadana indicó que “Estas concesiones de acuicultura otorgadas al interior de áreas protegidas no podrán ser relocalizadas, ni presentarse respecto de ellas solicitudes con la finalidad de ampliar el área concedida, o aumentar el nivel de producción máxima autorizada”.
Es necesario asegurar que entre las causales de caducidad de las concesiones de acuicultura otorgadas al interior de áreas protegidas se contemplen “situaciones tales como un evento de mortalidad y escapes que revistan el carácter de masivos, el incurrir por una vez en condición anaeróbica de la columna de agua y fondos marinos, así como haber sido sancionado de conformidad con el inciso final del artículo 113, el inciso 1° del artículo 118, o por cualquiera de las infracciones enumeradas en el artículo 118 ter de la Ley General de Pesca y Acuicultura”, dijo Ecoceanos.