Hoy, la ciudadanía tiene clara conciencia de que la Ley de Pesca debe ser revisada. Más allá de la forma en que esta se aprobó, se trata de una ley que va en contra de los intereses del país, porque no reconoce al Estado de Chile como dueño de los recursos del mar, impide la competencia en el sector y ha propiciado la depredación, como revela el hecho de que en dos años de vigencia han aumentado de dos a ocho las especies en colapso.
Por: Riola Solano
Publicado en Elmostrador.cl
Julio de 2015
Desde hace unas semanas, las máximas entidades gremiales de la industria pesquera, Sonapesca y Asipes, han desinformado a la opinión pública señalando que los cuestionamientos a la Ley de Pesca que han realizado organizaciones de pescadores artesanales, académicos, actores políticos y algunos parlamentarios, obedecen a oscuros intereses económicos de Lota Protein.
Esta es una afirmación, además de falsa, delirante y por ello la rechazamos absolutamente. ¿Podrá dar crédito la opinión pública a que la oposición a la llamada “Ley Longueira” sea dirigida desde Lota por una empresa que tiene el 0,7% de las cuotas industriales?
Las críticas a la Ley de Pesca obedecen a la ilegitimidad de su contenido, tanto en su origen como en su implementación, por ello el programa de la Presidenta Bachelet indicó la necesidad de revisarla.
La historia es fácil. El primer ministro de Economía del Gobierno de Sebastián Piñera, Juan Andrés Fontaine, abogaba por la sostenibilidad del recurso pesquero, abrir el mercado a nuevos actores y asegurar mejores condiciones a la pesca artesanal. El ex ministro Pablo Longueira, quien lo reemplazó en julio de 2011, cambió esos objetivos y dio origen a la llamada Ley Longueira, después de imponer los criterios de la gran industria, tal como quedó de manifiesto en el mail de 22 de octubre de 2011, cuando Héctor Bacigalupo, de Sonapesca, informaba sobre los resultados de la mesa de trabajo creada por el ministro.
En ese entonces, fueron 17 destacados economistas los que hicieron públicas sus discrepancias con ese proyecto de ley, señalando, entre otras cosas, que: “Proponer que los actores del sector dividan recursos que no les pertenecen, renunciando el Estado a representar el interés público, constituye un ejemplo de corporativismo político ajeno a nuestra tradición democrática”. Entre ellos participaron Eduardo Engel, Roland Fischer, Andrés Velasco y el actual ministro de Economía Luis Felipe Céspedes.
Desde esa fecha en adelante, se privilegiaron intereses particulares por sobre el bien común. Consecuentemente, la Ley de Pesca fue ganando detractores en todos los sectores de la vida nacional, con excepción de la gran industria que defiende sus privilegios.
Hoy, la ciudadanía tiene clara conciencia de que la Ley de Pesca debe ser revisada. Más allá de la forma en que esta se aprobó, se trata de una ley que va en contra de los intereses del país porque no reconoce al Estado de Chile como dueño de los recursos del mar, impide la competencia en el sector y ha propiciado la depredación, como revela el hecho de que en dos años de vigencia han aumentado de dos a ocho las pesquerías (especies) en colapso.
La actividad pesquera es rentable sin necesidad de regalos ni privilegios. Nuestra empresa es una prueba de ello. Nosotros compramos a los artesanales casi el 90% de la pesca que procesamos.
Queremos para la pesca en Chile un sistema sostenible, transparente, justo y competitivo, como en Europa, en donde el 70% de la pesca se subasta. Para esto, la licitación es la forma más efectiva, porque asegura que los más eficientes tengan las cuotas y además paguen por ellas un precio justo al Estado, lo que permitirá financiar las legítimas demandas del sector laboral y artesanal pesquero.
Esta es una oportunidad para que el Estado fije condiciones a los asignatarios de las cuotas, por ejemplo, que la pesca se procese en suelo chileno, que se establezcan máximos de acumulación de cuotas y que los asignatarios de estas mantengan altos estándares ambientales, sociales y laborales, bajo pena de perderlas.
Lota Protein está orgullosa de su origen nórdico (Noruega y Dinamarca), porque nos ha transmitido valores de bien común y de sostenibilidad por los que nos guiamos en Chile. Somos la única empresa pesquera que cuenta con Sello Pro Pyme (paga a todos sus proveedores –principalmente pescadores artesanales– antes de 30 días) y aunque es receptora de privilegios asignados por la Ley de Pesca, aboga por la revisión de dicha ley porque perjudica el interés general de Chile.
El sector empresarial pesquero debe convencerse de que los privilegios deben terminar y que, si a Chile le va bien, también a nosotros nos va bien …. y no al revés.
Riola Solano
Gerente de Asuntos Corporativos de Lota Protein